No vimos a Marte juntos.
Está cerca otra vez como hace 13 años.
No vimos a Marte juntos.
Su luz naranja vino anunciando cambios.
Te fuiste y no nos tomamos el tiempo de verlo juntos.
En estas noches cada vez que salgo al jardín, veo en el cielo esa estrella naranja tan peculiar en este cielo africano y me pregunto si tú estarás haciendo lo mismo en dónde te encuentres y si en ese preciso momento piensas en mí extrañándome bajo su luz.
Marte nos une y se impone en este cielo así como en el de hace 13 años.
De alguna manera su luz nos toca.
No vimos a Marte juntos, pero está ahí, cerca, con nosotros otra vez.