
Me gustó este párrafo de la novela Enduring Love de Ian McEwan, en el que el protagonista busca una palabra que definiera lo que sentía. Aunque el tema de la novela pudiera parecer truculento – un hombre se obsesiona con otro luego de que comparten la experiencia de un accidente en el que una persona muere- McEwan lo maneja de tal forma que pierde todo melodrama. Pero dejo el comentario hasta acá porque no me da nota hacer crítica. Sólo digo que el libro me gustó bastante y fue una buena introducción a este autor al que estoy leyendo por primera vez, luego de mucho coqueteo con sus títulos en las librerías.
Escribiendo esta nota descubro que ya hicieron la película con Enduring Love (El intruso- en español) en el 2004. La película Atonement (Expiación-en español) está también basada en una novela de McEwan.
Aquí el fragmento…
… The last words I had written before losing control of my thoughts had been ‘intentionality, intention, tries to assert control over the future’. These words referred to a dog when I wrote them, but re-reading them now I began to fret. I couldn’t find the word for what I felt. Unclean, contaminated, crazy, physical but somehow moral. It is clearly not true that without language there is no thought. I possessed a thought, a feeling, a sensation, and I was looking for its word. As guilt was to the past, so, what was it that stood in the same relation to the future? Intention? No, not influence over the future. Foreboding. Anxiety about, distaste for the future. Guilt and foreboding, bound by a line from past to future, pivoting in the present – the only moment it could be experienced. It wasn’t fear exactly. Fear was too focused, it had an object. Dread was too strong. Fear of the future. Apprehension then. Yes, there it was, aproximately. It was apprehension.»
Enduring Love, Ian McEwan.
© Ian McEwan, 1997.
Vintage, 2006.
Londres, Reino Unido.
P 43.
«…Las últimas palabras que había escrito antes de perder el control de mis pensamientos habían sido ‘intencionalidad, intención, trata de afirmar control sobre el futuro’. Estas palabras se referían a un perro cuando las escribí, pero releyéndolas ahora empecé a angustiarme. No podía encontrar la palabra para lo que sentía. Sucio, contaminado, loco, físico pero de alguna manera moral. Claramente no es verdad que sin lenguaje no hay pensamiento. Poseía un pensamiento, un sentimiento, una sensación, y estaba buscando por su palabra. Tal como la culpa era al pasado, así, ¿qué era lo que destacaba en la misma relación con el futuro? ¿Intención? No, no influencia sobre el futuro. Presentimiento. Ansiedad acerca, disgusto por el futuro. Culpa y presentimiento, atados a una línea del pasado al futuro, pivotando en el presente – el único momento en el que podría ser experimentado. No era miedo exactamente. Miedo era demasiado enfocado, tenía un objeto. Terror era muy fuerte. Miedo del futuro. Aprensión entonces. Sí, eso era, aproximadamente. Era aprensión.»
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Referencias en español:
- Ian McEwan en la wikipedia
- Viaje Literario / Aloha criticón
- Entrevista en La Nación
- Entrevista en El País
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