Etiqueta: Libertad de expresión

PS: Libertad de expresión

La libertad de expresión es un derecho de todos.
Nadie tiene derecho a coartarla en otros, pero eso sucede.
Gracias a leyes amañadas o ambiguas.
Gracias a medios que someten a sus periodistas a acatar una línea editorial tendenciosa o callando a sus columnistas eliminándoles el espacio cuando más les conviene.
Sucede gracias a grupos o particulares que amenazan, agreden o matan a quienes no se quieren callar denunciando hechos criminales, defendiendo causas o tomando posturas.
En todos los casos priva la intolerancia a la disensión, a la diferencia de opinión, intolerancia que proviene de la arrogancia que da el poder político, mediático o de las armas.

Nuestra libertad ha sido más insultada y amenazada hasta ahora que coartada en realidad. Ha habido más intolerancia por parte de la población al ejercicio del periodismo que lo que el gobierno ha demostrado. Sus seguidores extremistas son quizás los que hayan adelantado los ataques a los disensores, azuzados por el verbo guerrero del presidente. La respuesta opuesta no se hace esperar y profesionales de los medios oficiales también son atacados y agredidos.
Es decir, en la arrogancia de cada bando no hay posibilidad de razón en el otro. A priori está equivocado.

Nosotros no tenemos periodistas secuestrados o muertos ni por guerrilla, paramilitares, o narcos como en Colombia donde el ejercicio de la profesión realmente requiere de mucha valentía e integridad.

En Bangladesh los ataques son a escritores que critican el fundamentalismo religioso ya sea en sus novelas, ensayos o poemas , así como a periodistas que activamente cuestionan sus actividades. En lo que llevo aquí han habido como 4 casos sonados de asesinatos a escritores y periodistas prominentes. No sé de verdad cómo se salvó Salman Rushdie, porque el fundamentalismo no perdona.

En nuestro país habrá que ver si avanzamos hacia una mejor tolerancia mutua. Entretanto veremos.

Tomárselo con calma

El post anterior ha generado unos buenos comentarios, especialmente el de Bureado y un post de RomRod, El riesgo de expresarnos libremente.

RomRod habla de expresarnos a pesar de todo, como una manera de reforzar el principio del derecho que tenemos a ello libremente y dice:

«Si Miguel está siendo acosado y amenazado por lo que dice con todo derecho, aún cuando pudiera estar equivocado o parcializado que es su derecho por supuesto, es bueno que sepa que cuenta con más recursos de lo que cree y que hay gente de ambos bandos que apoya la libertad plena de expresión. La mayoría de los que escribimos estos blogs no somos periodistas ni abogados y no sabemos ni papa de la diferencia entre opinión e información o entre un insulto bien merecido a un canalla o la difamación, simplemente queremos decirle al mundo que la libertad de expresión es un derecho y que opinar y cuestionar a los que ocupan puestos públicos no solamente lo consideramos un derecho sino también una obligación y si estos personajes no les gusta pues que se la calen porque están para responder al pueblo y para que el pueblo los controle no para que ellos controlen al pueblo.»

Bureado dice:

«…la posición de liderazgo del Gobierno la ha ganado en gran parte gracias a la expansión de su plataforma comunicacional a Internet. Sin duda alguna hoy en día hay un equilibrio de fuerzas en Internet, anteriormente estaba en manos de los que se oponen, hoy está parejo pues el Gobierno tiene una fuerte red de páginas web, diarios, noticias, boletines y foros. En fin, es cuestión de tomárselo con calma, defender lo que uno piensa sin entregar aquello que precia más que lo que digan una o dos personas, y seguir trabajando.»

En principio ambos tienen razón. Habría que seguir posteando y defender lo que uno piensa y además tomárselo con algo de calma.

Sin embargo, a RomRod le digo que siendo el blogueo una práctica nueva y una nueva tecnología, no tiene un marco legal claramente discernido y aplicable aparte del copyright o derechos de autor, ni en Venezuela ni en el resto del mundo. Eso de un diario personal público con la inmediatez que brinda internet no existía hace unos 6 años más o menos y como medio de comunicación popular es nuevo. Creo que es muy posible que se le apliquen en el futuro disposiciones semejantes a las del periodismo, es decir, no podrás decir que x o z es un ladrón solo porque antes de tener un cargo gubernamental no tenía apartamento y ahora tiene un penthouse en la mejor urbanización de Caracas, etc. Hay que tener conciencia de que, por muy personal que sea tu medio, sigue siendo un medio, por lo que hay que asumirlo responsablemente conociendo las leyes y sus limitaciones. Por varios precedentes en casos internacionales en los que se han sentado jurisprudencias -aunque no eran blogs-, ya no importa si el sitio esta físicamente localizado fuera de tu país: si la audiencia del medio es nacional en su mayoría, la ley de tu país aplica.

A Bureado puedo decirle que como tengo tiempo que no estoy en Vzla, la bilis y las canas es por la angustia e impotencia que produce en la distancia todo lo que uno recibe de las noticias y los comentarios de amigos y familia. Nada más.

Es indudable la base social que tiene el gobierno y la eficiencia, inteligencia y lucidez en haber aprovechado la plataforma comunicacional que se ha construido y sigue expandiendo. El resultado del referendo apagó la beligerancia en la oposición. Porque a pesar de que ésta sospeche/crea en un fraude y de las ambigüedades en la Ley de Responsabilidad Social de los medios, el nuevo Código Penal, etc., la mayoría de la gente sigue acatando las leyes y las instituciones aunque no funcionen bien. Es decir, no habrá otra vez desobediencia civil, como con la huelga petrolera, con la cual la población opositora aprendió una lección amarga, y ya estamos viendo a las televisoras y radios moderándose no sólo en su programación sino en lo que dicen los comentaristas.

Pero falta entrar en una fase de diálogo y conciliación. Hasta ahora el diálogo que se quiere entablar es el de se hace como dice el gobierno y no como podamos acordar entre las partes. Lo cual de paso es lógico dentro de la estructura del proyecto revolucionario. Con la revolución ya hay un agenda previa, un plan prestablecido. Por lo que no hay nada que discutir ni acordar. Suena contradictorio dentro de un sistema de democracia participativa, pero es lo que se ha podido apreciar que sucede cuando los actores se reúnen a discutir.

Si se administrara justicia con «justicia» en los casos de las muertes dolorosas, evitables e innecesarias que han habido hasta el momento el país entraría en una fase de reconciliación, y los sectores opositores estarían más inclinados a integrarse y colaborar en los procesos de desarrollo con los que están de acuerdo dentro del plan de la revolución. Pero eso no ha ocurrido y más bien vemos afán por castigar el pasado político de opositores en vez de hacer una amnistía con gente que ya ha sido re-derrotada y la cual difícilmente levantará cabeza políticamente.

Entonces, por todo lo anterior, creo que es preocupante que a Octavio lo hayan amenazado a estas alturas. Es decir, ahora ya tenemos precedente en este medio tan nuevo y poco conocido en Venezuela como los blogs. Octavio es un bloguero con mucha audiencia pero en la realidad con un medio que no tiene impacto masivo como la TV, la radio o un periódico y además escrito en inglés. Es decir, su audiencia es muy exclusiva, porque tiene que hablar inglés, interesarle Venezuela y por supuesto tener acceso a computadoras. El impacto de The Devil’s Excrement es en ese sentido muy especializado y sin embargo, alguien se toma la molestia de amenazarlo. ¿A quién irritan sus comentarios? Coincido con Bureado que hay que tomárselo con calma porque como le dije a Octavio en su blog puede ser sólo un bluff y de repente producto de algunos malempatados del proceso a ver si de verdad se atemoriza y logran que se autocensure.

Sin embargo, ser prudente -más cabeza fría- y ver adónde llevan las nuevas leyes y como son aplicadas es ya un acto de autocensura y que estoy recomendando no por paranoia sino porque hay otros precedentes: a Israel Centeno, escritor, lo amenazaron con llamadas y finalmente con un cuchillo en el estacionamiento de su casa; a Milagros Mata Gil, escritora, a quien en El Tigre, según leí, le ametrallaron la casa; a Luis Brito, fotógrafo, a quien agredieron dentro de su casa, amén del cuasi atentado a la Colomina, y otros casos que se me escapan. No está de más ser prevenido y preguntarse seriamente si el riesgo vale la pena si las cosas se ponen difíciles.

El derecho a opinar y expresarse libremente es de todos y no es un derecho con color político. En eso estamos claros. Pero porque estamos claros y en desventaja en la democracia que vivimos en la Asamblea, en la Corte Suprema, en el CNE, en las gobernaciones, y en el resto de los poderes tenemos que ser prudentes porque no sabemos cuando se hará más o menos participativa en esta revolución.

Autocensura

Leí en El Excremento del Diablo, The Devil’s Excrement, que Miguel Octavio ha recibido advertencias y amenazas veladas por escribir en su blog lo que escribe todos los días.

Cito:

«Over the last two and a half years I have been writing this blog, without much concern about what I said or about whom. This is no longer the case. After recently receiving public, veiled and private warnings and threats, many of you may have noticed that my blog has become more newsy and and I have made it less opinionated or reduced the amount of color that I add to the news. This will be the case while I figure out where to go from here.»

Traduzco libremente:

«Cerca de los últimos 2 años y medio he estado escribiendo este blog, sin mucha preocupación acerca qué dije o acerca de quién. Este ya no es el caso. Luego de recibir recientemente públicas, veladas y privadas advertencias y amenazas, algunos de ustedes pueden haber notado que mi blog se ha puesto más noticioso y lo he hecho menos opinionado o reducido la cantidad de color que añado a las noticias. Este será el caso mientras dilucido adonde ir desde aquí.»

La verdad es que lo de las amenazas no tendrán éxito en el largo plazo. Las cosas que pasan siempre se saben y más en nuestro país en donde especialmente a funcionarios menores de gobierno les encanta dárselas de importantes, de que «saben cosas» y por eso todo el mundo termina sabiendo los cuentos de las primeras damas, barraganas, corruptelas, cangrejos, componendas políticas, acuerdos de cogollos, etc. , en medio de unos güisquicitos. El chisme vulgar, radio bemba que llaman. Esto no es nuevo, ni tampoco de la 4ta. República, es de siempre. Desde que fuimos provincia del reino hasta ahora que andamos en un quinto intento republicano.

Antes era más fácil impedir que las informaciones se diseminaran pero ahora con los sms, e-mail, sitios, newsletters, blogs, photoblogs, radioblogs, etc es como tratar de impedir el paso de la luz del sol por un colador. Así que a los intimidadores les deseo suerte con los no sé cuantos millones de usuarios de la red, telefonos celulares, etc con los que cuenta Venezuela a los que no podrán callar ni tracear si se toma conciencia de lo útiles de estas herramientas con fines políticos y que hasta ahora han sido bastante sub-utilizadas.

Si The Devil’s Excrement desaparece, seré una de las primeras en entenderlo porque no vale la pena malograrse por el señor que nos gobierna el país. Ya hemos visto que las muertes que se han producido hasta ahora no han sido honradas con ninguna investigación seria ni han sido hallados o acusados los culpables. Somos muchos los que no las olvidamos, pero a la mitad del país parecen no importarle… ¿qué esperanzas nos quedan entonces en la calidad humana del país, si hay aparentemente una mayoría a la que no le interesa que esos casos se resuelvan?

Si los seguidores del presidente están dispuestos a morir por él, pues me parece tan inteligente como la vocación de los que se suicidan estallándose en pedazos en el medio Oriente, con la diferencia de que estos últimos por lo menos tienen la oferta del cielo lleno de vírgenes del Islam y el prestigio y honor del martirio dentro de su sistema de creencias. Yo no entiendo la religión que adora dioses de carne y hueso y con tantos defectos humanos a la vista, como la que pareciera ser el chavismo. Porque no se me presenta como la lealtad a una ideología sino a una persona, falible como cualquier otro ser humano y capaz de aciertos también. Es decir ni más ni menos que cualquier otro mortal.

Quizás por eso no podría ser militar ni religiosa porque cuestionaría todo el tiempo a mis superiores. Siempre se me ha dificultado entender fidelidades recalcitrantes y ciegas a ningún líder político o ideología. Y menos a nuestro presidente y sus acólitos. Igual a los líderes de la oposición o los medios -no me entiendan mal- y que andan en extremos también. Creo que no estoy dispuesta a dejarme pegar un tiro o malograrme por nadie que no sea mi familia inmediata.

Así que si la amenaza es seria o nos organizamos y armamos ruido por haber sido amenazados, -porque al amenazarle a él lo hacen a todos los blogueros- o lo dejamos pasar en la anestesiada y exhausta voluntad de pelear contra lo que parece inevitable que va a suceder en Venezuela.

No tengo la exposición de Octavio, pero si he pensado en no escribir más opinión sobre lo que pasa en Venezuela porque es como llover sobre mojado. Se me está haciendo tan lugar común como lo que acabo de decir y al final solo se echa más bilis y canas. Esto que digo quizás no suene ejemplarmente correcto, ni valiente pero es que la verdad me pregunto si el riesgo vale la pena para uno que no tiene el nombre en marquesina como Bocaranda, Marianela Salazar, etc. a los que jamás creo que toquen por más que los amenacen. Uno es uno más en el montón y quizás no pasaría de ser una anécdota el que a un bloguero que escribe en inglés le hayan dado una tanda de palos por lo que escribe. A Bangladesh no creo que me vengan a buscar, pero ¿qué tal y si llaman a mi familia? Por lo que si Octavio decide «apagar» su blog o seguirlo haciendo menos colorido y más ascéptico no lo cuestionaría y seguiría leyéndolo. Sería una cagada con todas las letras que se viera coercionado pero lo entendería en lo absoluto.

Porque es que no quiero que haya más mártires ni héroes de ninguno de ambos bandos en el país.